#EscritoresAndaluces #EscritoresEspañoles #SigloXVI #SigloXVII
Cuantas al Duero le he negado aus… Tantas al Betis lágrimas le fío, Y, de centellas coronado, el río Fuego tributa al mar de urna ya ar… Volcán desta agua y destas llamas…
La vidrïera mejor en sus brazos de cristal entra al Sol hoy celestial en la capilla mayor; a cuyo resplandor,
Los días de Noé bien recelara Si no hubiera, Señor, jurado el c… En su arco tu piedad, o hubiera el… Dejado al arca ondas que surcara. Denso es mármol la que era fuente…
Grandes, más que elefantes y que a… Títulos liberales como rocas, Gentiles hombres, sólo de sus boca… Illustri cavaglier, llaves doradas… Hábitos, capas digo remendadas,
Allá darás, rayo, En cas de Tamayo. De hospedar a gente extraña, O Flamenca o Ginovés, Si el huésped overo es
Nilo no sufre márgenes, ni muros Madrid, oh peregrino, tú que pasas… Que a su menor inundación de casas Ni aun los campos del Tajo están… Émula la verán siglos futuros
Menos solicitó veloz saeta destinada señal, que mordió aguda; agonal carro por la arena muda no coronó con más silencio meta, que presurosa corre, que secreta,
Teatro espacïoso su ribera El Manzanares hizo, verde muro Su corvo margen, y su cristal puro Undosa puente a Calidonia fiera. En un hijo del Céfiro la espera
¡Que se nos va la Pascua, mozas, que se nos va la Pascua! Mozuelas las de mi barrio, loquillas y confiadas, mirad no os engañe el tiempo,
Por tu vida, Lopillo, que me borr… Las diez y nueve torres del escudo… Porque, aunque todas son de viento… Que tengas viento para tantas torr… ¡Válgame los de Arcadia! ¿No te c…
Ánsares de Menga al arroyo van: ellos visten nieve, él corre cristal. El arroyo espera
Árbol de cuyos ramos fortunados Las nobles moras son quinas reales… Teñidas en la sangre de leales Capitanes, no amantes desdichados; En los campos del Tajo más dorado…
Descaminado, enfermo, peregrino, en tenebrosa noche, con pie incier… la confusión pisando del desierto, voces en vano dio, pasos sin tino. Repetido latir, si no vecino,
Que pida a un galán Minguilla cinco puntos de jervilla, bien puede ser; mas que calzando diez Menga, quiera que justo le venga,
Verdes hermanas del audaz mozuelo Por quien orilla el Po dejastes p… En verdes ramas ya y en troncos gr… El delicado pie, el dorado pelo, Pues entre las rüinas de su vuelo