José Martí
Yo sueño con los ojos
abiertos, y de día
y noche siempre sueño.
Y sobre las espumas
del ancho mar revuelto,
y por entre las crespas
arenas del desierto,
y del león pujante,
monarca de mi pecho,
montado alegremente
sobre el sumiso cuello,—
un niño que me llama
flotando siempre veo!

Ciento veinte años de la partida física de este hombre íntegro y ejemplar. Ofrendó su vida con valor por sus ideales y por su Patria. Queda constancia de su amor, su pasión, sus valores, inteligencia y creatividad en trasparentes versos que se siguen festejando, lo mismo en la academia que en los cantos del Pueblo. El mejor homenaje que podemos hacer al Poeta José Martí, es leerlo.

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