Uvas, granadas, dátiles, doradas, rojas, rojos, hierbabuena del alma, azafrán de los poros. Uvas como tu frente,

Las gramas, las ortigas en el otoño avanzan con una suavidad y una ternura largas. El otoño, un sabor

Como la higuera joven de los barrancos eras. Y cuando yo pasaba sonabas en la sierra. Como la higuera joven,

Cogedme, cogedme. Dejadme, dejadme, fieras, hombres, sombras, soles, flores, mares. Cogedme.

Sonreír con la alegre tristeza del… Esperar. No cansarse de esperar l… Sonriamos. Doremos la luz de cada… en esta alegre y triste vanidad de… Me siento cada día más libre y más…

Abiertos, dulces sexos femeninos, o negros, o verdales: mínimas botas de morados vinos, cerrados: genitales lo mismo que horas fúnebres e igua…

El mundo es como aparece ante mis cinco sentidos, y ante los tuyos que son las orillas de los míos. El mundo de los demás

¿Qué pasa? Rencor por tu mundo, amor por mi casa. ¿Qué suena? El tiro en tu monte,

La cebolla es escarcha cerrada y pobre: escarcha de tus días y de mis noches. Hambre y cebolla:

Ay, hijo soy del ay, hijo soy del ay, mi hijo, hijo de su padre amargo. Ay, hijo soy del ay, en un ay fui concebido

Si hay hombres que contienen un al… una esparcida frente de mundiales… cubierta de horizontes, barcos y c… con arena y con nieve, tú eres uno… Las patrias te llamaron con todas…

Caídos sí, no muertos, ya postrado… están los hombres de resuelto pech… sobre las más gloriosas sepulturas… las eras de las hierbas y los pane… el frondoso barbecho,

(Hijo de la sombra) Eres la noche, esposa: la noche en… mayor de su potencia lunar y femen… Eres la medianoche: la sombra culm… donde culmina el sueño, donde el a…

La palmera levantina, la columna que camina. La palmera... la palmera... La palmera levantina, la que otea la marina,

Una querencia tengo por tu acento, una apetencia por tu compañía y una dolencia de melancolía por la ausencia del aire de tu vie… Paciencia necesita mi tormento,