#EscritoresUruguayos #SigloXX #SigloXXI #1974 #ElAmorLasMujeresYLaVida
Señor molusco caballero lapa ya sabés en qué malos paso ando conocés mis esquinas y mis fobias mis bares mis amores mi bufanda conocés las puteadas que rezo desp…
De haber tenido un hijo no lo habría llamado ni mario ni orlando ni hamlet ni hardy ni brenno como reza mi fardo onomástico
Los años vienen con raíces y algas y sueños remontados en la ola con los años también todo se olvid… los ritos del placer la noche vege… la alegría que ataca por el flanco
Seguro que los diarios no lo preguntarán los árboles ¿serán acaso solidarios? ¿digamos el olivo de jaén
A pesar de psicólogos / detectives / novelistas ingleses / los asesinos en su mayoría no vuelven al lugar del crimen huyen por lo común despavoridos
Viene contento el nuevo la sonrisa juntándole los labios el lápizfaber virgen y agresivo el duro traje azul
El marciano llegó en una nave reducida, casi portátil, algo así como un Volkswagen del espacio. Además de su propia lengua, sólo hablaba inglés, pero no el de la BBC sino el de Shakespe...
Nunca se consideró un exiliado político. Había abandonado su tierra por un extraño impulso que se fraguó en tres etapas. La primera, cuando lo abordaron sucesivamente cuatro mendigos en...
Quedan las cáscaras de vida la solidaridad de las columnas las pausas del escombro el pavoroso cielo gris la tierra exasperada
Entre el viejo delirio intimidante convertido en metralla elemental en azote o plomada o nubarrones contra surco alfabeto y guaguancó en astucia falaz pero de llamas
El autor no lo hizo para mí / yo t… lo leo para él / yo y el libro nos precisamos mutuamente / somos una pareja despareja / el libro tiene ojos tacto olfato
Loro no me grites loro callaté por favor no abuses de mi buena fe no me desprestigies
No cabe duda ésta es mi casa aquí revivo aquí sucedo ésta es mi casa detenida en un capítulo del tiempo llega el otoño y me defiende
Columnata de árboles o nada / sombras sobre piedras herméticos zaguanes o nada / hojas en el viento la llaman calle de abrazados
Se trataba de un muchacho corriente: en los pantalones se le formaban rodilleras, leía historietas, hacía ruido cuando comía, se metía los dedos a la nariz, roncaba en la siesta, se lla...