Rafael Alberti
Gentes de las esquinas
de pueblos y naciones que no están en el mapa
comentaban.
 
  —Ese hombre está muerto
y no lo sabe.
Quiere asaltar la banca,
robar nubes, estrellas, cometas de oro,
comprar lo más difícil:
el cielo.
Y ese hombre está muerto.
 
  Temblores subterráneos le sacuden la frente.
Tumbos de tierra desprendida,
ecos desvariados,
sones confusos de piquetas y azadas,
los oídos.
Los ojos,
luces de acetileno,
húmedas, áureas galerías.
El corazón,
explosiones de piedras, júbilos, dinamita.
 
  Sueña con las minas.
Preferido o celebrado por...
Otras obras de Rafael Alberti...



Arriba