#EscritoresChilenos #PremioNobel #SigloXX #1923 #Crepusculario
La tarde sobre los tejados cae y cae... Quién le dio para que viniera alas de ave?
Caminando hacia el mar en la pradera —es hoy noviembre—, todo ha nacido ya, todo tiene estatura,
Si tu pie se desvía de nuevo, será cortado. Si tu mano te lleva a otro camino se caerá podrida.
Niña morena y ágil, el sol que hac… el que cuaja los trigos, el que tu… hizo tu cuerpo alegre, tus luminos… y tu boca que tiene la sonrisa del… Un sol negro y ansioso se te arrol…
Estación invencible! En los lados del cielo un pálido cierzo se acumulaba, un aire desteñido e invasor, y hacia todo lo que los ojos abarcaban, como una espesa leche, como una cortina...
Hay que volar en este tiempo, a dó… Sin alas, sin avión, volar sin dud… ya los pasos pasaron sin remedio, no elevaron los pies del pasajero. Hay que volar a cada instante como
Otra vez, otra mil vez retorno al Sur y voy viajando la larga línea dura, la interminable patria custodiada por la estatua infinita de la niev…
Todos me piden que dé saltos, que tonifique y que futbole, que corra, que nade y que vuele. Muy bien. Todos me aconsejan reposo,
En su llama mortal la luz te envue… Absorta, pálida doliente, así situ… contra las viejas hélices del crep… que en torno a ti da vueltas. Muda, mi amiga,
Juegas todos los días con la luz d… Sutil visitadora, llegas en la flo… Eres más que esta blanca cabecita… como un racimo entre mis manos cad… A nadie te pareces desde que yo te…
Quítame el pan si quieres, quítame el aire, pero no me quites tu risa. No me quites la rosa, la lanza que desgranas,
Oh amor, oh rayo loco y amenaza pu… me visitas y subes por tu fresca e… el castillo que el tiempo coronó d… las pálidas paredes del corazón ce… Nadie sabrá que sólo fue la delica…
Hierro negro que duerme, fierro ne… por cada poro un grito de desconso… Las cenizas ardidas sobre la tierr… los caldos en que el bronce derrit… Aves de qué lejano país desventura…
Dios -¿de donde sacaste para encen… este maravilloso crepúsculo de cob… Por él supe llenarme de alegría de… y la palabra dura supe tornarla no… Entre las llamaradas amarillas y v…
Cuántas veces, amor, te amé sin ve… sin reconocer tu mirada, sin mirar… en regiones contrarias, en un medi… eras sólo el aroma de los cereales… Tal vez te vi, te supuse al pasar…