Éste es mi corazón: el partidario de los días callados y las frutas. Hace sus fiebres raras y absolutas y yo lo pierdo en mí. Soy su sudar… Nadie sabe el misterio que convoca…

No digo: amo, no develo mi historia esta mañana, respeto a los felices, voy al bufete, hago la cama,

I Hugo Ania Mercier: yo te quería. A tu cuerpo de hombre agonizante que irradiaba dolor como un diaman… a tu paso que insiste todavía,

Matanzas: bendigo aquí tus malecones mojados, los árboles desterrados del Paseo de Martí y el eco en el Yumurí.

Cuenta el pobre los fósforos y el rico sus palacios; aquél se ha salvado de las adulaci… y el dinero. Sus manos no pueden aplaudir en la…

Callados, por la tarde, gravemente… sin elegir el sitio de la tierra, tú y yo nos besaremos como en guer… hasta quedarnos fríos frente a fre… Yo, cada vez más tumba que se ahon…

¡Ay, hermanos que tengo por el mun… ay, mi carne perdida en tres pedaz… ¿Dónde están esos rostros, esos br… dónde están que en mí misma los co… Aquí vivo con patria pero sola,

Padre entonces que hacías la esper… empeñado de hijos, de hipoteca: resucito tu mano nunca seca que no supo de piedra ni de lanza. Te enfermaba el insomnio cuando ju…

Por el mundo camino entre los rost… buscando el tuyo, entre sombras que no hace tu cuerp… entre besos que no ofreces, bajo nubes que no te acompañan;

Muchacho loco: cuando me miras solemnemente, de arriba a abajo, siento que arrancas tiras y tiras de mi refajo. Muchacho cuerdo: cuando me tocas

Usted ha dicho que me ama pero quien está convicto de alucin… quien no conoce milagros naturalmente se equivoca si ve una… casi de negro.

Por poderosa sangre voy llamada aun latido constante de temblores. Me quedo en esa huída de las flore… con ese fin de soledad tocada. Y cerca de esto, que parece nada,

No lo puedo decir. La voz precisa quedó bajo el silencio sepultada; cuando retoza el crimen ya no es n… el diente que pelea en la sonrisa. No lo puedo decir. Y acaso es lar…

Yo venía con una paz solemne, con una fiebre de pascua recobrada… fija al dolor no obstante, y ya estabas allí: pálido papel para mis besos,

Amor, amor de aquí: pásame el braz… por la cintura. Amor, toca esta fr… di una frase vulgar, casi inocente… ríe, ríe después... Tengo un retaz… de sol bajo la tela de mi hombro.