(1956)
#Chilenos #PremioNobel #SigloXX #Odas (1957) Tercer [1955-1957] de las libro
Hoy que es el cumpleaños de mi her… nada que darle, nada. No tengo nad… Todo lo que poseo siempre lo llevo… A veces hasta mi alma me parece le… Pobre como una hoja amarilla de ot…
Pero si ya pagamos nuestros pasaje… por qué, por qué no nos dejan sent… Queremos mirar las nubes, queremos tomar el sol y oler la sa… francamente no se trata de molesta…
Se van rompiendo cosas en la casa como empujadas por un invisible quebrador voluntario: no son las manos mías,
Mientras la magna espuma de Isla… la sal azul, el sol en las olas te… yo miro los trabajos de la avispa, empeñada en la miel de su universo… Va y viene equilibrando su recto y…
A ti, manzana, quiero celebrarte llenándome con tu nombre
Toda la noche he dormido contigo junto al mar, en la isla. Salvaje y dulce eras entre el plac… entre el fuego y el agua. Tal vez muy tarde
En medio de la tierra apartaré las esmeraldas para divisarte y tú estarás copiando las espigas con una pluma de agua mensajera. Qué mundo! Qué profundo perejil!
Adelante, le dije, y entró el buen caballero de la muerte. Era de plata verde su armadura
De noche, amada, amarra tu corazón… y que ellos en el sueño derroten l… como un doble tambor combatiendo e… contra el espeso muro de las hojas… Nocturna travesía, brasa negra del…
La dentellada del mar muerde la abierta pulpa de la costa donde se estrella el agua verde contra la arena silenciosa. Parado cielo y lejanía.
Cumpliendo con mi oficio piedra con piedra, pluma a pluma, pasa el invierno y deja sitios abandonados, habitaciones muertas:
Fidel, Fidel, los pueblos te agra… palabras en acción y hechos que ca… por eso desde lejos te he traído una copa del vino de mi patria: es la sangre de un pueblo subterrá…
Los ojos se me fueron detrás de una morena que pasó. Era de nácar negro, era de uvas moradas, y me azotó la sangre
Ahora me dejen tranquilo. Ahora se acostumbren sin mí. Yo voy a cerrar los ojos. Y sólo quiero cinco cosas, cinco raíces preferidas.
Ay sí, recuerdo, ay tus ojos cerrados como llenos por dentro de luz negr… todo tu cuerpo como una mano abier… como un racimo blanco de la luna,