#EscritoresArgentinos
Basta de religión basta de política la Poesía requiere la integridad de un hombre
Me tocaba alejarme de mí mismo. Cada mirada era mi mirada. Cada palabra era mi voz. La Poesía desea en nuestro amor
Él era mi padre y caminaba siempre unos pasos delante de todas las mujeres. Yo era su hijo y lo reconocía siempre
El que predica en la montaña será el predicador de la montaña. El que come su pan apresuradamente será el hambriento.
Soy me doy cuenta un nadador muerto de frío. Lo que me pasa es el amor. También es la nostalgia por mi país, mi barrio
Soy un hombre moderno. Atado de pies y manos decido el vu… Al principio me arrastraré y con el tiempo podré levantar un poco la cabeza.
Estoy casi muerto y sin embargo siento latir mi corazón. Una especie de rebuscada finura
Tu cuerpo se me aparecía por las noches como una montaña y yo trepaba por tu cuerpo
Dejar olvidar de a poco el que soy. Hundirme lentamente en las horas de la noche
Ya nunca más arpegios voluptuosos Se tomará el café por las mañanas y por las noches furtivamente se hará el amor contra reloj
Esta noche me ofrezco para ti calcinado en dolor entrecortado de silencios. Busco entre las palabras tu cuerpo y mis versos se llenan de tristeza…
Guitarras rasgadas con odio. Balas disparadas con odio. Tambores de locura. Rauda armonía de la muerte estás aquí
Creciendo me fui dando cuenta que vivir no era suficiente. En principio comencé por cambiar algunas horas de mi vida por algunas palabras.
Viví como pude todo este tiempo hambriento ya nadie convencí. Llegaron a pensar
Días para recordar todo lo que no se pudo. Esos días que los muertos vienen en tropel a preguntar