Vi cómo los perfiles del tiempo se posaban levemente en mi piel dejando una marca.

Dejo de latir dejo de ser el pulso donde antaño vibrara el Universo. Delicadamente me entrego a las argucias del amor

Estoy casi muerto y sin embargo siento latir mi corazón. Una especie de rebuscada finura

Viví como pude todo este tiempo hambriento ya nadie convencí. Llegaron a pensar

Ser extranjero es algo verdaderamente increíble. A veces por largos días soy sólo el contorno de mi cuerpo

Tu cuerpo se me aparecía por las noches como una montaña y yo trepaba por tu cuerpo

Búhos de la locura amaron mi carne hasta el extravío amaron mi dolor hasta los límites de la carne. ¿Mi escritura es un mandato social

Creciendo me fui dando cuenta que vivir no era suficiente. En principio comencé por cambiar algunas horas de mi vida por algunas palabras.

Piel abrochada a mi garganta piel de pieles. el hombre que buscaba no existe ni siquiera en mí. Retrocedo todo

Volver volver volver hundirme en la lujuria de ese canto hundirme hasta no poder más.

alejo de mí mis propias esperanzas para alojarme de presente cuerpo en tu mirada.

Dejar olvidar de a poco el que soy. Hundirme lentamente en las horas de la noche

Voluptuosa semilla aquí me planto y creceré y aquí echaré raíces y tendré brotes

Hilos. Nudos. Sonrisas. Pequeña gloria. Hombre en las tinieblas. Soy el que ya no sufre. No pido pan.

Me tocaba alejarme de mí mismo. Cada mirada era mi mirada. Cada palabra era mi voz. La Poesía desea en nuestro amor