UNA DANZA NOCTURNA
Una danza nocturna
Danzaban sobre MI balcón por las noches, las estrellas y la luna, y la luna me parecía ser tu sombra en la que baila, sobre el corazón de la noche.
A la luz de las estrellas que resplandecían, sobre la desnudez con la que te veían mis ojos: ¡enjoyada sobre unos pétalos de rosas lindas y suspiradoras!... que suspiraban todo lo hermoso de ti.
Al danzar, tu belleza, tu hermosura, que producían una música encantadora y sensual, bajo los ojos del vigilante de la noche que se inspiraba con tanta belleza.
Y escuchando, a la música de un lejano mundo, que a los lejos escuchándole era como una voz que se fundían entre la brisa del viento hasta llegar a mis oídos, en una vasta y silenciosa armonía.
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