Queridísima Shirley: quiero decirte, ante todo
Que lo siento mucho al no tenerte,
Ya no estaré contigo, más estaré ausente,
Me despido, amor, para irme, con la muerte.
Tú sabes, que siempre te he amado, amada
¡Con mi cariño y al precio de mi suerte!...
Y aunque hoy o mañana no estés conmigo
¿Dónde mi alma vaya te tendrá presente?
¿Qué fue pecado? No amor, somos humanos
Fueron tiempos floridos en nuestro huerto,
Y aunque ese bello amor se haya terminado
Quedarán los recuerdos de nuestros sueños.
Que mi tiempo, ya ha llegado, a su sepultura
Y me obliga a decirte todas estas cosas,
Al precio de mi alma y al precio de mi vida
Llora una lágrima de amor al filo de mi fosa.
¿Qué son cosas de niños? alguien nos dijera;
¡Jugar con el amor y los lirios del jardín!...
Es un dolor en donde no encuentra su salida
A este llorar profundo que le va poniendo fin.