Alma mía, ¿hasta cuándo te rodeará tu pena?
Preocupación por el hombre que amas,
¿No te humilla gritar sin que el te responda?
¿No es hora de tirar lágrimas por la ventana?.
Y tu sabes, que afuera, suele acogerte el frío,
Se que tu corazón busca rosas y flores,
El fruto de los árboles y la gracia del rocío,
¡Y el amor que tu perdiste de aquel hombre!.
Vamos a liberar un poco de amor, alma mía;
Se que sufres y quieres volverlo amar,
Y si en verdad el te ama y tu eres su alegría
Deja que te busque, y te aprenda a valorar.
Sé valiente, y decidida en tu íntima riqueza,
Y para que se aleje la vencida tristeza,
Lancemos ese amor por la abierta ventana,
Ya verás, que arrepentido tu amor regresa.