#Cubanos #Habaneros #Modernismo #SigloXIX
Por tus ojos encendidos Y lo mal puesto de un broche, Pensé que estuviste anoche Jugando a juegos prohibidos. Te odié por vil y alevosa:
Quieren, ¡oh mi dolor!, que a tu h… De su ornamento natural despoje, Que el árbol pode, que la flor des… Que haga al manto viril broche y c… Quieren que el verso arrebatado en…
Con un astro la tierra se ilumina; Con el perfume de una flor se llen… Los ámbitos inmensos. Como vaga, Misteriosa envoltura, una luz tenu… Naturaleza encubre, y una imagen
¡Oh! la sangre del alma, ¿tú la ha… Tiene manos y voz, y al que la vie… Eternamente entre las sombras acus… ¡Hay crímenes ocultos, y hay cadáv… De almas, y hay villanos matadores…
A los espacios entregarme quiero Donde se vive en paz y con un mant… De luz, en gozo embriagador henchi… Sobre las nubes blancas se pasea, Y donde Dante y las estrellas viv…
Yo soy un hombre sincero De donde crece la palma, Y antes de morirme quiero Echar mis versos del alma. Yo vengo de todas partes,
¿Mi musa? Es un diablillo Con alas de ángel. ¡Ah, musilla traviesa. Que vuelo trae! Yo suelo, caballero
Vino el médico amarillo A darme su medicina, Con una mano cetrina Y la otra mano al bolsillo: ¡Yo tengo allá en un rincón
La madre está sentada Junto a la cuna:- Por la ventana gótica calada Entran risueños quiebros de luna. La madre está espantada,
Ved: sentado lo llevo Sobre mi hombro: Oculto va, y visible Para mí sólo: Él me ciñe las sienes
De oro de su corazón me manda un cubano fiel el querido pabellón. Hoy sin huestes ni laurel, quiero que mi corazón.
Yo puedo hacer, puedo hacer De esta desdicha una joya; ¡Pero me la habrán de ver!— No, vive Dios: ¡paso atrás! Mi pena es mi hija: ¡mi hija
Bien: yo respeto A mi modo brutal, un modo manso Para los infelices e implacable Con los que el hambre y el dolor d… Y el sublime trabajo; yo respeto
El alma trémula y sola Padece al anochecer: Hay baile; vamos a ver La bailarina española. Han hecho bien en quitar
La fatiga y las sábanas sacudo: Cuando no se es feliz, abruma el s… Y el sueño, tardo al infeliz, y el… A ver la luz que alumbra su desdic… Resístense los ojos,—y parece
