He atesorado su mirada en el espejo de las siete lunas y sus ojos me hablaron.
Alégrate por el bienestar de otros. La envidia, envenena el alma.
La oruga se solaza entre las hierbas del bosque. Un bosque tranquilo
¡¡Relámpago de fuego!! ¡¡Consúmeme!!
Los grillos ya cantan su ancestral canción. Sonido de la noche húmeda y estrellada.
Mar, que la sed transforma en sal. Mar, espejo voraz,
Me llamo Noé a quien visita la viajera paloma en mi nave
Mar chileno he sorbido tu salobre hálito has sido navegado por humildes canoas de cuero en antaño
Hombres y mujeres caminan por puentes y senderos hacia el futuro. La vida debe ser edificada
Movía su rueca mágica mientras cantaba himnos angelicales.
Fuente de hermosas aguas y verdes juncos... ¡¡Heme aquí!!
Del suelo mana agua láctea mana purpúreo vino mana néctar de rubias abejas que sube como oloroso incienso
Tú, Madre sembradora de soles que en el cielo tejes
Color de sol color de luna color de espuma color de miel color del tiempo.
Sacerdotisas llevan en sus castos brazos pequeños cofres y vasos sagrados para honrar y ofrendar