Haiku
¡Eh, tú! Si no disimules ¿Por qué llegas de repente sin avi… No entendiste nada, ¿Verdad? en la puerta dejé tu maleta, ¿Acas… No pongas cara de Póker,
El cielo se viste de gala rojo pasión, naranja, turban el tranquilo azul. Sereno brilla el sol en tu orilla en este lado del mar
Mecen al viento tus cabellos, cuando decides encumbrar el mundo. Gimen las ramas al ser embestidas, tempestad que envuelve tu vida. Rebeldes las lágrimas fluyen,
Atrapados entre las letras dormitan los sentidos cubriendo la hoja en blanco con tinta de emociones, deslumbran los detalles
Un, dos, tres, contaba Luisillo arrimado a la par… Cuatro, cinco, seis, se rasca, le pica la piel del pie. Siete, ocho, nueve, diez,
Es ese fantasma que atraviesa el a… el que ahoga los respiros hasta la… ese miedo que derrumba los castill… el vacío que llena mis calles del… que en solitaria procesión
Entre las piedras crece el musgo dónde la ciencia era un don, gentes de aquellas tierras universos tan dispares. Pirámides, antiguos habitantes,
En la armonía del momento el silen… que rompe la melodía de las odas dejando revertir contra las rocas la injusticia del destino sentenci… Felonía que acuciante avanzando
Tú, yo y el tango Música que deleita los sentidos marcas el ritmo del deseo sin miedo, ese tango que te embauc… sinprisa, con pausas
Teorías, universos, cuerdas. Energía cuántica en movimiento, materia inerte nuestro cuerpo, torbellinos en movimiento, millones de partículas inestables,
Se esculpen a tu paso, en cascadas resguardadas en las entrañas duerm… horadadas por el viento, crujen las crestas, quedando fosilizadas. Secretas oquedades bajo el agua
Son las caras de la luna manchas que en tu cuerpo delatan maltrato, es la zona umbría
Enreda el viento canalla tu melena al vaivén de tus caderas, resuenan los adoquines a tu paso mientras marcas serena tu ritmo, impregnas en el aire tu perfume con el rítmico acomodo de ...
Carne y sangre nos unen, imperan lazos que nutren, fuiste vida en mi ser, eres ser de mi vida. Luz que me indica el camino,
Una ceniza entre sus dedos eso es lo que queda una tierra baldía tras su paso. Con sus ojos inocentes,