Cada verdad, cada vergüenza, cada verticidad
ahora dormidas
en cada verso, en cada vértigo
porque anoche soñé que me moría
me moría me moría me moría
y no sé si habito un recuerdo
más allá del engaño de mi vida
y sigo viviendo después de muerto
y es solo una sombra mi cuerpo
y son volutas de humo mis nervios
y un puñado de raíces mi cerebro
soñé que me moría
y fue tan bueno
pensar por un momento
que ya no estaría
en este desierto
y ya no tendría sed
ni hambre ni heridas
soñé que me moría
pero fue solo un sueño
apenas un intento
para dejar de sentirme cuando
me despierto.