Una vez, hace ya muchos años —“Hace ya tanto tiempo que me parece ayer”—, abrì mi corazón de par en par y le dije: “Entra, esta es una casa. Està un tanto en desorden debido a mi torpe...
Conmigo, en el amor, mi dulce Cas… es más que Cicerón en la tribuna: conoce los secretos de la cama, es entusiasta y única. Mas su torpe marido
¿Dónde poner la cabeza? Me dijeron: —los pies sobre la tierra. las alas en el viento y las manos arriba!
Y no nos han dejado otro camino. Y está bien que así sea. Recibimos el golpe en la mejilla, la patada en la cara. Y pusimos la otra mejilla,
Nada de ésto es así. Esta no es nuestra tierra. Ni ésta ni cualquier otra ni el ag… Yo soy un desterrado. Todavía mi espalda tiene dolor de…
Cuando una hormiga cae ninguno se da cuenta. Cuando yo estoy sufriendo hasta la… sólo yo lo averiguo. Y se me antoja hoy—no sé por qué z…
Tengo ganas de un poco de entusias… que no siento hace tiempo. No sé por qué no sabe a nada vivo ni el mes, ni la avenida, ni la lu… En realidad también tengo la culpa
Paso el Ejército y del dulce pueblito que antes era atractivo turístico en las postales multicoloridas, no quedo piedra sobre piedra
Base de tu figura es tu pie breve y porque en él se inicia tu estatu… lo encuentro de principio en tu fi… como el agua es principio de la ni… Se me interna en alma su blancura
Cuando se dieron cuenta ya era tar… irremisiblemente se acercaba. Al principio hubo varias opiniones… No faltaron los radicales que pretendían acabar con todo
Aguja de una iglesia que se eleva con esa clara unción de la plegari… Árbol con golondrina necesaria. Parque: almendro que músicas renue… Ansiedad de un crepúsculo que llev…
Amo, con todo lo que soy, este suelo y su gente. Por eso mismo, sufro de manera atroz. Por eso mismo me duele hasta el aire que pasa. Por eso mismo no quisiera estar aqu...
Aquí queda el océano: los pesquero… Aquí, la costa: el algodón, banano… cacao, ganado y paludismo. Mas acá, el altiplano, las fincas… Y mas acá, hasta arriba, se encuen…
Manso remanso del río. Estrella en el cocotero. Tanta paz cabe en enero para tanto dolor mío. Tanto color. Tanto frío.
Tú, que vienes caminando desde el fondo de mi vida; que traes como bandera la música de tu risa; tú que en tus ojos escondes