No me quiero morir con este sentimiento: el dolor, que es el destino del poeta, el alimento del poeta

¿Habrá un mundo o realidad paralela en la que puedo tomar tu mano besar tus labios pronunciar tu nombre

Siempre me estoy yendo, nunca llegando La sensación que me habita es la de la despedida, la del destino del marinero,

Seguramente no sabes que lo poco que fue, bastó para desbordar Unas palabras, una actitud,

Me habita un sentimiento atrapado y cautivo en su jaula: el corazón. Como un pajarito, aletea ansioso, triste.

Lo único que me queda es un sentimiento de muerte –Thána… que nace de la certidumbre que en esta vida no estaré contigo Vivo el tedio de estar cerca de ti

Una distopía, eso fuimos. Un futuro maltrecho, un aborto. Desechados,

Un fantasma, algo que alguna vez fue, y ya no es. Una nostalgia (lo que eres tu) ¿Qué fui para ti?

Viejo sentimiento ¿porqué insistes en visitarme, una y otra vez? ¿qué quieres de mi? ¿mi vida?

No eres consciente de todo lo que tuvo que acontecer desde el comienzo de los tiempos hasta hoy para que nos encontráramos.

En los últimos tiempos la vida ha sido más dulce por ti, por lo que eres, por tu presencia y por tus ausencias. Por los momentos, que en realidad son instantes, que compartimos juntos, ...

Cual animal salvaje, te acecho. Te busco, sigo tu rastro. Me agazapo a la espera,

Mi suerte estaba echada aún antes de tu nacer. Mi destino contigo estaba escrito (por quien era, por quien soy) Era inevitable,

Nombrarte en secreto es lo único que me queda, lo único que se me es permitido; aunque sea una experiencia de muer… Porque cada vez que te nombro