A esta hora duermes, sueñas. A esta hora, pienso en ti. Cualquier cosa,
No eres consciente de todo lo que tuvo que acontecer desde el comienzo de los tiempos hasta hoy para que nos encontráramos.
te volveré a ver y no seremos los mismos la vida habrá pasado y en el fondo del alma algo se removerá
Mi suerte estaba echada aún antes de tu nacer. Mi destino contigo estaba escrito (por quien era, por quien soy) Era inevitable,
Malaya la hora en que me fijé y VI tu existencia. Malaya la hora en que te sentí y vi mi existencia. Malaya la hora en que te besé
hoy lo que queda de ti es un jardín secreto, con una única flor marchita. En él me refugio para morir cada vez un poco.
Así, mirándote a los ojos mientras… entro por ellos hasta tu más íntim… el de tu sensualidad, de tu lujuria, de tu sexo.
Despierto maquino e imagino mil situaciones mil encuentros mil diálogos
Hay un ojo en tu nuca que me mira pero no me ve y aún así me dice quien eres en verdad te conozco
Hoy, por primera vez, me embarga un sentimiento nuevo: el odio
Sentimiento que nace sin resonanci… que no encuentra eco; cuyo gemelo nace muerto. Sístoles sin diástoles. Sentimiento que sin ese otro,
No eres consciente del demonio que… Un sentimiento antiguo y doloroso, por prohibido, por imposible. ¿Qué hago ahora contigo? No tengo otra opción que padecerte…
Me sorprendo mirándote, tu allí, yo aquí. Tan cerca, tan lejos.
Último fruto. La copa más amarga para el final, de modo que este sabor me acompañe
En la mañana, cuando a lo lejos te veo, nace la impotencia del ave enjaula… Así estas corazón mío, con la nostalgia