Bendito sea el Diablo, que me ama… al rojo de su capa y de su pluma, y mis sentidos en amor sahúma, y en fuego de dolor los achicharra… Brinda una flor en su espumosa jar…
(A Félix Matos Bernier) Bajo el manto de sombras de la pri… la mano de Elohím, ahíta en el der… de la bíblica luz del fiat omniful… te amasó con la piel hosca de La s…
No sé si danés o ruso, genial cuentista relata que en el nido de una pata la hembra de un cisne puso. Y ahorrando las frases de uso
Guíñale al sol la cabaña. El río es brazo que se pierde por entre la manga verde que cuelga de la montaña. El yerbazal se desbaña.
El—La historia de nuestro amor, que aún sahúma tu memoria, fue breve como la historia de la abeja con la flor. Prisionera de la flor,
A doña Panchita el sol la hizo de carne trigueña. El sol la hizo buena moza. El sol la hizo buena hembra. Le puso negro el cabello;
La golondrina mansa del recuerdo se ha posado en mi torre de poeta. Viene de las difuntas lejanías... Del lado allá de las aradas sendas… Del sequedal escueto del olvido...
Mi gallo ama el bosque umbrío de la verde cordillera y la caricia casera de la hamaca en el bohío. Cuando lanza su cantío,
Ensueño que estoy cenando y que tu espalda es mi mesa, acostada su blancura, como en la playa te viera nadando sobre la ola
Ay, qué lindo es mi bohío y qué alegre es mi palmar y qué fresco el platanar de la orillita del río. Qué sabroso es tener frío
Deja, jibarita blanca, deja que el jíbaro cante y que a medianoche suba la Cuesta del Asomante. Deja que el jíbaro cante,
Para asomarme, desde mi alma, al m… ábrete y serás tú la única puerta. Ábrete en un amor tan ultrahumano que se salga del caso de la tierra… Ábrete en el temblor de la mirada
Cuando yo más la quería, se fue para el camposanto. Toda la sal de mi llanto no sazona el alma mía. En mi choza ya vacía,
Esta noche la luna no quiere que y… Esta noche la luna saltó por la ve… Y, novia que se quita su ropa de a… toda ella desnuda, se ha metido en… Viene de lejos, viene de detrás de…
Ya está el lucero del alba encimita del palmar, como horquilla de cristal en el moño de una palma. Hacia él vuela mi alma,