Déjame amar tus claros ojos. Tien… lejanías sin fin, de mar y cielo, y sus fulgores apacibles vienen hasta mi corazón como un consuelo. Deja que con tus ojos, se iluminen

Yo tenía una sola ilusión: era un… pensamiento: el río que ve próximo… y quisiera un instante convertirse… y dormir a la sombra de algún viej… Y decía mi alma: turbia voy y me c…

Yo estaba entre tus brazos. Y rep… no sé cómo, en un ángulo de la alc… el aire se hizo cuerpo, tomó forma… y era como un callado fantasma que… Veía, entre el desorden del lecho,…

Palpitan, como alas de pájaros en… las velas que sacude la brisa mati… y el aire, a flor de onda, menudam… la seda azul, tramada de estambres… De la dorada costa la placidez sub…

Topacios y amatistas, zafiros y es… se funden en la hoguera de un ocas… y, en negro, se dibuja, sobre las… al filo de las cumbres, una palma… Al lado opuesto sube, del monte…

Como al fondo del mar baja el buzo en busca de perlas, la inspiración baja a veces al fondo de mis tristezas para recoger estrofas

Más, apóyate más, que sienta el pe… de tu brazo en el mío; estás cansa… y se durmió en tu boca el postrer… y en tus pupilas la última mirada. ¡Qué fatiga tan dulce, la fatiga

Como en el fondo de la vieja gruta… perdida en el riñón de la montaña, desde hace siglos, silenciosamente… cae una gota de agua, aquí, en mi corazón oscuro y solo,

Y fueron de la tarde las claras ag… el sol, un gran escudo de bronce r… hundiéndose en los frisos del colo… dio formas y relieves a raras fant… Mas de improviso, el orto lanzó de…

¿Qué si me duele? Un poco; te con… que me heriste a traición; mas por… tras el rapto de ira vino una dulce resignación... Pasó el exces… ¿Sufrir? ¿Llorar? ¿Morir? ¿Quién…

Beso tus ojos tristes como suele sus reliquias besar, en tanto reza… una anciana piadosa. Y tu cabeza que a perfumadas liviandades huele… beso, porque mi beso te consuele,

Miré, airado, tus ojos, cual mira… mordí tus labios como muerde un re… posé mi boca inquieta, como un páj… en tus desnudas fromas ya trémulas… Cruel fue mi caricia como un remor…

Era un cautivo beso enamorado de una mano de nieve, que tenía la apariencia de un lirio desmayad… y el palpitar de un ave en la agon… Y sucedió que un día,