Aquí estamos los poetas vivos
En un mundo distinto y ajeno
Entre libros de marchitas hojas
en una fiesta de ausencia y olvido.
Aquí estamos los poetas vivos
Como vivos Neruda y Vallejo
Como Whitman sobre las aguas del cielo
Como quinqué de fuego infinito.
Aquí estamos los poetas vivos
Con los bolsillos rotos y atadas las manos
Escribiendo con sangre de risa y pasión de llanto
Porque mientras tu corazón camine y canten los ríos
Aquí estaremos siempre los poetas vivos.