La muerte es un matiz de la existencia,
morir es florecer en otra forma;
la caduca materia se transforma
en ser nuevo, en rosales o en esencia.
La vejez es la humana inconsistencia
que sometida a la inflexible norma
de Natura, se rompe o se deforma
en átomos, en luz o en florescencia.
¿Por qué miedo a la muerte? No lo acierto,
si de todo placer triunfan las penas,
las cuales finan cuando el ser ha muerto.
La vida se desciñe sus cadenas
y en la huesa, en el carmen o en el huerto,
la carne se hace espigas o azucenas.