Mujer, toda mi sangre está presente
Contigo en esa lucha que sostienes.
Contigo está mi amor incandescente
Y en tu llanto y en tu duelo me contienes.
Nunca en la vida estuve tan deprisa,
Tan lleno de relámpagos y ruegos,
Como ahora que ha muerto tu sonrisa
Y están con tu dolor todos tus llantos y fuegos.
Nunca estuvo mi amor tan a tu lado,
Nunca como esta noche de tortura,
Cuando sufre mi amor crucificado
En el mismo tablón de tu amargura.