#EscritoresMexicanos (1922) (1923) Canciones Canciones Nuevas y
Colmena de la tarde, diálogo del v… la palabra es abeja, pero el silen…
Era de noche tan rubia como de día morena. Cambiaba, a cada momento de color y de tristeza, y en jugar a los reflejos
Como el bosque tiene tanta flor oculta, parece olorosa la luz de la luna. Como el cielo tiene
Mujer mirada en el espejo umbrío del baño que entre pausas te prese… con sólo detenerte, una tormenta de colores aplacas en el río... Sales al fin, con el escalofrío
Esta tarde ya sé que me quieres. Me lo dicen tus ojos dormidos, que el silencio es, en ciertas muj… una fronda cargada de nidos... Hay palabras que el alma retiene
Huías... pero era en mí y de ti quien huías. ¿Cómo? ¿Adónde? ¿Para qué? Por todo lo que es vial, ascensor, tragaluz, puerto
La primavera de la aldea bajó esta tarde a la ciudad, con su cara de niña fea y su vestido de percal. Traía nidos en las manos
Vas a llorar pronto. Ya el cielo se hace chiquito en tus ojos.
Enterrado vivo en un infinito dédalo de espejos, me oigo, me sigo, me busco en el liso
Tiempo y figura fui, mientras la e… curiosidad de ser distinto, en cad… minuto de la frívola jornada arrojaba mi anhelo a la deriva. Tiempo y figura: cólera pasiva,
Amanecía tu voz tan perezosa, tan blanda, como si el día anterior hubiera llovido sobre tu alma...
Naranjitas de China, naranjitas doradas que caían, maduras, al corral de mi casa de una casa vecina,
Nada más, Poesía: la más alta clemencia está en la flor sombría que da toda su esencia. No busques otra cosa.
Regreso, otra vez y pienso... —se piensa siempre, al volver—. Un árbol... un cielo inmenso y un corazón de mujer. ¿Un corazón o una cara?
Palabra musical y enternecida, sonrisa de la luz entre las lágrim… eso, mi poesía... ¡Y —más alto—tu alma!