Creo que Lorca había escrito
algo de sangre de cristales
y aquí estoy yo, muy a pesar mío,
mirando a través de la ventana
el vacío entre las gotas
más que las gotas en el vacío
pensando, tal vez –a quién miento,
a mi mismo– en lo que siempre piensan
las personas
y largando lluvia gota a gota
desde un cielo de ojo que te mira
como si fuera romántico te digo
otra vez palabras que me llueven...
(lo de Lorca era, y ya recuerdo:
"divinas heridas de diamante")