Estrellas sobre el campo. Y algo más allá: una verdad inexti… Perpetuas bellezas, y ya idos bail… Si hay un cuerpo hay dos cuerpos, y de espaldas a la tierra, almas c…
[...]soy también lo ausente en mis poesías, la espalda de mis palabras, una autentica costra que avanza unida a mi piel.
Como un baile nacido de mí pasa el agua que no es agua, pero fluye a través, como sangre, golpeando, como lluvia, por todas partes, como aire; y cae el velo y estoy solo, ya ni antes ya...
un sofisticado un exagerado ángel de metal en la ciudad del hi… accionista de días domingos el más útil para inutilidades
atrás, atrás, muy atrás estábamos con los que estaban con el cuerpo partido y sus partes… con los ojos viéndose el tejido, l… su espalda
El seductivo imperativo de escribe y mi deseo íntimo, secreto, de explicar un sentimiento íntimo, secreto también,
El aire que aman mis pájaros, la luz intravenosa y transparente. Las alas unidas al hueso y a la ll… y como en la nada, caen mis pájaro… Sobrevivir y luego vivir:
Demasiado orden: El mar azul es azul. El sol amarillo es amarillo. Los arboles verdes son verdes y al… Los vidrios trasparentes lo son.
El color debe ser el azul. El sentimiento, la tristeza. Poca gente, es lo que veo, y una g… Siempre escribiré sobre lo mismo. La profecia de una ruina,
En el bronce de tu cuerpo la mano artista que, aunque acaric… moldea.
Si, con razón de ser, el ser es atraído hacia otro ser, la carne es indispensable hacia otra carne; si, como si fueran dos imanes, las almas, al no mirarse, se alejan una de otra, y al ...
Cremar es desaparecer la huella donde fracasaste, donde moriste, es no haber muerto, ser siempre triunfante
qué magico el mundo cuando tu ries se abre detras un extenso mar y se… tu rostro tiene la forma que no pu… en mi rostro que tiene la forma que solo pudo s…
Gente en la fila, gente en la calle, gente en las estaciones, en los trenes, en los edificios; que propicio en esta noche
No es incorrecto deducir al más doloroso de los casos del amor como un resultado de la búsqueda constante de uno mismo. Allí es donde persevera la esperanza. Corderos de la sombra aú...