Búcate plata, búcate plata, poqque no doy un paso má: etoy a arró con galleta, na má.

Caminando, caminando, ¡Caminando! Voy sin rumbo caminando, Caminando; Voy sin plata caminando,

A Camagüey suelo ir por revivir mis claros días de infancia. Aspiro allá en su fragancia rosas que no volverán.

Si es que me quieres matar, no esperes a que me duerma, pues no podré despertar. Muerto, ay, muerto y también dormido,

La tarde abandonada gime deshecha… Del cielo caen recuerdos y entran… Duros suspiros rotos, quimeras las… Lentamente va viniendo tu cuerpo. Llegan tus manos en su órbita

Cuando no te tenía, te tenía cuando quise tenerte, te perdí. Ay, dime si la culpa ha sido mía, y cómo es que ha pasado todo así. A esta hora, que es noche, antes f…

Miradas de metales y de rocas No Cortés, ni Pizarro (aztecas, incas, juntos halando el… Mejor sus hombres rudos saltando el tiempo. Aquí, con sus…

Chile: una rosa de hierro, fija y ardiente en el pecho de una mujer de ojos negros. right—Tu rosa quiero. (De Antofagasta vengo,

A veces tengo ganas de ser un curs… para decir: La amo a usted con loc… A veces tengo ganas de ser tonto para gritar: ¡La quiero tanto! A veces tengo ganas de ser un niño

Era una muchachita de carne perfum… con agua de Colonia y jabón de Ca… a quien amé con una pasión vaga y… que nació de unos versos de amor y… Recuerdo que al decirle por primer…

Así como después de la tormenta el guardabosque sale para saber cuál ácana, cuál guayacán, cuál ébano cayó desarraigado por el viento,

Conozco la azul laguna y el cielo doblado en ella. Y el resplandor de la estrella. Y la luna. En mi chaqueta de abril

Por el camino de la mar vino el pirata, mensajero del Espíritu Malo, con su cara de un solo mirar y con su monótona pata

Con mi tres o con su cuatro, cante, Juan Bimba, yo lo acompaño. —Canto en Cuba y Venezuela, y una canción se me sale:

Ayé me dijeron negro pa que me fajara yo: pero e que me lo desía era un negro como yo. Tan blanco como te ve