Cristales de tu ausencia acribilla… que se esparce en la noche por el glacial desierto de mi alco… —Yo quisiera ser ángel y soy loba—… Yo quisiera ser luminosamente tuya

Se dibuja un redondel con un lápiz o un pincel, con mucho pelo, mucho moño, ojos, cejas y un retoño; nariz chata de alpargata,

Una y una, dos. Dos y una, seis. El pobre burrito contaba al revés. ¡No lo sabe!

La oveja La oveja bala, (a base de balidos las ovejas se comunican con sus vecinos).

Las cosas, nuestras cosas, les gustan que las quieran; a mi mesa le gusta que yo apoye lo… a la silla le gusta que me siente… a la puerta le gusta que la abra y…

Sobre el césped los árboles me hab… del divino poema del silencio. La noche me sorprende sin sonrisas… revolviendo en mi alma los recuerd…

Que estás en la tierra, Padre nue… Que te siento en la púa del pino, En el torso azul del obrero, En la niña que borda curvada La espalda, mezclando el hilo en e…

Me quité de en medio por no estorbar, por no gritar más versos quejumbrosos. Me pasé muchos días sin escribir,

El burro nunca dejará de ser burro… Porque el burro nunca va a la escu… El burro nunca llegará a ser cabal… El burro nunca ganará carreras. ¿qué culpa tiene el burro de ser b…

El camello se pinchó con un cardo del camino y el mecánico Melchor le dio vino. Baltasar

El corazón de la Tierra tiene hombres que le desgarran. La Tierra es muy anciana. Sufre ataques al corazón —en sus entrañas—.

Escribo sin modelo a lo que salga, escribo de memoria de repente, escribo sobre mí,

Miradme aquí, clavada en una silla, escribiendo una carta a las paloma… Miradme aquí, s que ahora podéis mirarme.

Ya ves qué tontería, me gusta escribir tu nombre, llenar papeles con tu nombre, llenar el aire con tu nombre; decir a los niños tu nombre

Soy como esa isla que ignorada, late acunada por árboles jugosos, en el centro de un mar que no me entiende, rodeada de nada,