Al derrüido templo
Llega, tal vez, ferviente peregrino,
Y ante el altar se postra
En donde en polvo convirtióse el ídolo.
Patriota, di, ¿qué buscas,
¿Qué buscas, afanoso, en este sitio?
¡Ni el ideal de Patria se recuerda;
Su aspiración fue sueño ya maldito!
Besa el mármol del ara,
El mármol, aun ayer, en sangre tinto,
Do consumió tu arrojo
El cruento, no igualado sacrificio;
Y con santo pavor de aquí te aleja:
¡Solo estás ante el polvo de tu ídolo!