La claridad del día ya no es más que el parpadeo de un ciego que se… que el encuentro de la memoria y e… Nos orientamos hacia una falsa cla… y el sol de este verano es una cos…

Dirán que se ha dormido para siemp… que un ala color fuego y otra colo… el ángel de su voz baja por ella lleno de un Cristo único: impacien… que esperezándose de su vida profu…

No toco la trompeta ni subo a la t… De la revolución prefiero la neces… aunque sea por las razones más déb… hasta diletando; y soy, como se ve… que ya en loss años treinta y pico…

El hijo único sería el mayor de su… y en su orfandad algo tiene de eso que se entiende por la palabra may… sus imposibles hermanos menores. Mucho más riguroso que el luto rep…

La llamamos la Calva, creemos asi… todos desde el colegio a su parca… o desde más allá cuando nacemos y ella, medio escondida de la teta… nos da la suya

No me resolví nunca a abandonar la… Del otro lado del cerco se me hici… La trepidación de un viejo automóv… y se abstuvieron ya de razonar y d… hundiéndose en el polvo victorioso…

Un tal Quevedo usaba del soneto para platonizar su mal de amores sonsoneteando de uno y mil colores a la llamada Lésida; respeto toda mala costumbre, era un tercet…

No se renueva el personal de esta… el elenco de la prostitución gasta… bajo una luz polvorienta que se le… Una doble hilera de caries, dentad… Es la escenografía de esta Danza…

De todas las desesperaciones, la d… ella y el miedo a morir, cruz y ra… cuando ya se puede pronosticar el… Hay una fea probabilidad de que el… normalmente inseparables como la u…

No me voy de esta ciudad con la resignación de los visitantes en tránsito cosas que no tuvieron, por definición, un futuro pero que, ciertamente, llegaron a envejecer, pues las dejo a ...

Barro, rencor inagotable. Toda ot… a la presión de esta materia origi… Los días del agua están contados,… que sustituye al agua cuando ciega… No así los días del barro que nos…

La desaparición de este lucero lo puso ferozmente en evidencia no era Venus, la estrella vesperti… no era Venus, la estrella matutina Era una lucecilla intermitente

Este gallo que viene de tan lejos… iluminado por el primero de los ra… este rey que se plasma en mi venta… no pregunta ni responde, grita en… como si no existieran sus invitado…

Finito todo y también estos brazos que se me tienden en la semipenumb… y un hilo —el de la voz—soplo que… pero incisivamente de una fuente:… El bello aparecer de este lucero

Nada tiene que ver el dolor con el… nada tiene que ver la desesperació… Las palabras que usamos para desig… No hay nombres en la zona muda Allí, según una imagen de uso, vic…