Verdades de Perogrullo en la vida cotidiana
En la vida diaria, todo es un lío,
como el agua moja y el fuego es frío.
Bueno, no es cierto, ¡no exageremos!
Verdades de Perogrullo todos sabemos.
Si el sol amanece, el día comienza,
y cuando se duerme, el cuerpo descansa.
Las calles están llenas si hay mucha gente,
y si nadie camina, ¡quedan ausentes!
La lluvia te moja si no hay paraguas,
y el vino te embriaga si tomas tres jarras.
Si corres muy rápido, te agitas, sudas,
y si nunca te mueves, ¡te oxidas sin dudas!
El pan es más rico si tiene manteca,
y el café calienta si está en la greca.
Si gastas dinero, la cuenta decrece,
y si ahorras un poco, el futuro agradece.
Para hablar, hace falta mover la boca,
y en un día caluroso, el helado se nota.
Si ríes, estás feliz, eso es evidente,
y si lloras a mares, algo hay en tu mente.
Los lunes son largos, los viernes ligeros,
y siempre el descanso se vuelve el primero.
Si hay mucho trabajo, nadie se alegra,
y si hay vacaciones, la sonrisa se muestra.
Ahi va la vida, entre dichas y penas,
con verdades simples y muchas escenas.
Pero no te preocupes, ni entres en embrollo,
que vivirla bien, ¡sin el menor escollo!
