Nuestros mundos eran tan distintos,
que parecía imposible hallar la unión.
Tú, de tierras lejanas y ancestros imprints,
yo, de un lugar que te era mera ficción.
Culturas que se miraban con recelo,
tradiciones que chocaban sin cesar.
Pero en nuestros corazones ardía un anhelo
que logró todos los muros derribar.
Poco a poco, fuimos aprendiendo
a entender la riqueza de nuestras diferencias.
En cada palabra, en cada gesto, íbamos viendo
la belleza que encierra la diversidad de esencias.
Juntos, recorrimos senderos inexplorados,
descubriendo que el amor es un lenguaje universal.
Que puede unir pueblos, culturas y legados,
y hacernos sentir que en este mundo, no hay nada que nos pueda separar.
Hoy, nuestras raíces, tan distintas y lejanas,
se han entrelazado formando una nueva identidad.
Pues el amor, cuando es sincero, nos vuelve humanos.
y nos enseña que la unión es la verdadera felicidad.
Vencimos fronteras, derribamos barreras,
para encontrarnos al fin en un solo corazón.
Ahora, juntos recorremos estas nuevas senderas,
construyendo un amor que trasciende toda división.