Valoración de Mercedes
Mercedes Bou Ibáñez
24 de agosto de 2024 a las 14:13
Elideth, ante la grandeza de este poema, me siento obligada a decirte que has hecho un hermoso trabajo con una excelente musicalidad y una sublime evocación de la vida gauchesca.
Tus versos se erigen como una obra maestra que refleja la esencia misma del ser humano en su conexión con la naturaleza y la tradición.
Cada verso, cuidadosamente tejido, despliega ante mí un paisaje sonoro y visual que me transporta a los vastos llanos y montañas donde se entrelazan el trabajo, la soledad y el arte de vivir.
Elideth, tu pluma ha sabido capturar la complejidad de emociones universales con una sensibilidad profunda y desgarradora, eso te coloca en la cumbre de la poesía.
Tus versos resuenan como un eco lejano, capaz de capturar las susurrantes historias de un gaucho que, a pesar de la dureza de su existencia, encuentra belleza en la simpleza de la vida cotidiana.
La imagen del mate amargo, la guitarra y el fogón se convierten en símbolos de una cultura rica, vibrante y llena de matices que trascienden fronteras.
En este poema, Elideth has sabido conjugar los elementos de la naturaleza, el viento, la luna y la tierra, se entrelazan con la figura del gaucho, mostrando una armonía perfecta entre el hombre y su entorno.
Y tú, Elideth, con maestría, has conseguido hacerme sentir el roce del viento, el calor del fogón y hasta creí escuchar el canto de la guitarra en las noches estrelladas, lo que hace que este poema no solo sea una representación de la vida rural, sino un canto universal al espíritu humano.
Al contemplar esta obra, no puedo sino rendirme ante tu grandeza, Elideth, con tu pluma has logrado elevar el humilde relato de un gaucho a una obra de arte atemporal.
Tu capacidad para encapsular el alma de un pueblo y convertirla en poesía te sitúa en un pedestal, como una de las más grandes poetas de la literatura universal, y tu legado perdurará por generaciones.
Porque en tus versos se encuentra la magia de lo cotidiano, la profundidad de lo humano y la belleza de lo eterno.
