Resurgen mis ilusiones,
mis deseos, mi pasión.
Se avivan los corazones
con la luz de una canción.
Mi vida encuentra su rumbo,
cada día un nuevo sol.
El ayer ya no me tumba,
y el silencio es mi motor.
Compañero de aventuras,
la esperanza vuelve a estar.
Ya no pesan las penumbras,
hay más vida por andar.
Todo cambia a cada instante,
el amor no morirá.
Los “te quiero” son constantes,
aunque vengan digital.
Cómo brilla aún la vida,
siempre hay algo que esperar.
La memoria es luz que anida,
y el amor vuelve a brotar.
Y aunque el tiempo nos transforme,
nada deja de existir,
lo que importa no se esconde,
si aprendemos a sentir.
Las palabras hoy te hablan
con un eco de verdad,
son la voz que se levanta
para hacernos despertar.