En fuego se consume mi latido, ardiendo en la penumbra de tu abra… un eco de mi alma alzó su brazo y halló en tu piel el cielo presen… Tu boca es el rubí jamás vencido,
En el reino del caos y del desorde… un gato decidió ser presidente, con un bigote que a todos sorprend… y un maullido que a veces desborde… Sus discursos eran pura locura,
Oh juventud, fugaz y radiante, brillas como el oro al amanecer, tu luz nos envuelve, vibrante, con promesas que buscan renacer. Cada instante es un tesoro dorado,
Allá, donde el viento susurra desp… y el cielo parece dormir en su paz… se alzan los Andes Suizos, como un sueño eterno de nieve y cr… Las cumbres se visten de blanco si…
No puedo decirte que no te amo, sin que mi mirada se desvíe de la… Mis sentimientos son más fuertes q… y no puedo negarlos, aunque lo int… No puedo mentirte y decir que no s…
Esperando tu llegada, el tiempo pa… Lento, cual sombra que se alarga a… Y en mi alma un profundo anhelo cr… Que nada puede calmar, nada consol… Ansío el momento de verte llegar,
Soy esclavo de tu amor, fiel amante, que a tus pies se postra. Tu belleza me hechiza, tu sonrisa me hipnotiza,
Se pierde en el abismo la memoria, un eco va quebrando el aire incier… la sombra del ayer cuenta su histo… susurra desde el alma un paso muer… El tiempo, con su aguja transitori…
Soy el pulso que brota de la roca… un canto desgarrado que abraza la… El viento en su suspiro pronuncia… y el fuego que me habita es llama… Soy río que desciende buscando su…
May poetry always accompany you, in every step you take, in every d… may it be your light in the shadow… your refuge in the storm, your com… May poetry be the echo of your joy…
En el espacio cibernético, donde la palabra es libre, un poeta virtual late, con versos que nos abrazan. Con cada clic, un soneto,
Oh, Amazonas, río gigante, Serpentina de agua que cruza la ti… Tus aguas, espejo del cielo, refle… La historia de un continente, su m… Desde los Andes, tu nacimiento,
Es la paciencia un arte de la vida… un río que se calma en su fluir, el pulso que se aprende a conducir y encuentra en su cauce la salida. El tiempo, con su mano tan medida,
Del tiempo el ala, con veloz carre… Mis campos de alegría va talando, Y lo que ayer tan bello se mostrab… Hoy marchito y caduco se halla. En vano intento asir la fugaz hora…
Ahí va, cargando su solemnidad, un peso muerto que él llama arte. Cada paso, un golpe de gong, cada palabra, un eco hueco. El cigarro en la mano,