Margarita Ferreras
Soy la brasa que grita, la hoguera… un río desbordado de sangre y de p… la piel enardecida que en labios n… un grito de tormenta que exige ren… Soy la carne que clama su trono en…
Oh fuente clara, espejo del cielo, donde el agua danza con suave brío… en tus profundidades veo el hilo de un mundo en calma, perdido en a… Las hojas murmuran secretos viejos…
En este yermo que mi alma habita, ¿Dónde te escondes, amor lejano? El beso tuyo sanaría mi herida, Mas huye, dejándome un vacío arcan… ¿Dónde resuenan las palabras dulce…
La noche se viste de plata y azul, un manto de estrellas, su velo sut… La luna, señora, con gesto de tul, derrama su hechizo, misterio sin f… Las ramas se mecen, susurran al vi…
En el país donde el río susurra, bajo un cielo de espejos y trinos, un pianista teje melodías, sus dedos danzan sobre las teclas… Las notas flotan como hojas de sau…
Perseverante en la senda infinita, con fe como faro en la tempestad, los días forjan mi esencia bendita… siguiendo el eco de la verdad. Sembrando amor en cada jornada,
Ese anillo que me diste, Lo tengo muy guardado, Al dedo le queda flojo, Y al corazón apretado. Tus palabras como el viento,
Resurgen mis ilusiones, mis deseos, mi pasión. Se avivan los corazones con la luz de una canción. Mi vida encuentra su rumbo,
Aunque es mía la sonrisa, tú eres… el faro que ilumina mi oscura sole… Eres eco en mis sueños, susurro ve… la llama que me abraza con dulce c… Si en mi boca florecen las rosas d…
En mi llanto, cual lluvia torrenci… Tu voz es bálsamo de mi dolor. En mi regaño, cual rayo infernal, Tu sonrisa apacigua con su candor. El pesar que me ahoga y el pesar,
El dolor puede que dure una noche, pero la alegría llegará en la maña… las sombras cubren cada derroche, mas la luz siempre nos gana. Las estrellas susurran consuelo,
En sombras que abrazan la luz con… se alza un pincel con su canto pro… un grito de amor que redime triste… un eco de fe que transforma este m… Un pan que se parte, un hambre cal…
Hoy calla la voz que un día tronó, hiriente y certera, como un puñal, la que con furia y con su cantar a tantas heridas nombre les dio. Paquita, guerrera de un viejo agra…
Bajo la luna brilla el mar, las olas cantan su canción, el viento empieza a susurrar, bailando en dulce vibración. Las estrellas miran jugar,
En la mente danza la tristeza, como sombra que nunca se va, pero en medio de tanta crudeza, la alegría también brillará. Hay días que el alma se siente,