Mujer, esencia pura y eterna,
luz que danza entre la brisa,
alma fuerte, tierna estrella,
que en su vuelo cicatrices alisa.
Y aunque el mundo gire incierto,
con sus sombras y su estruendo,
sigues firme, sigues dentro,
flor nacida en todo invierno.
Eres llama, eres río,
huracán de suave canto,
universo sin vacío,
luz que habita en cada encanto.
Y si el tiempo va y te arrastra,
y la vida se desvela,
no hay ocaso que desgaste
la pureza de tu estela.