Los hilos del silencio
Por los hilos del silencio me pierdo,
En un laberinto sin fin,
Donde los susurros se vuelven recuerdos,
Y las voces se desvanecen en el tiempo.
Caminando en la oscuridad,
Guiado por mi propia voz,
Buscando una salida,
Que me libere de este dolor.
Pero cuanto más avanzo,
Más me enredo en los hilos,
Del silencio que me rodea,
Y me consume poco a poco.
Las palabras se quedan atascadas,
En mi garganta sin poder salir,
Y mi alma grita en silencio,
Sin nadie que pueda escucharla.
Las lágrimas se convierten en mi compañero,
En este camino sin rumbo,
Donde el silencio es mi único testigo,
De mi dolor y mi sufrimiento.
Pero en medio de esta oscuridad,
Aparece una luz tenue,
Que me muestra el camino,
Hacia la salida de este laberinto.
Sigo el brillo de esa luz,
Con todas mis fuerzas y mi fe,
Y poco a poco voy desenredando,
Los hilos del silencio que me aprisionan.
Finalmente llego a la salida,
Y salgo a la luz del sol,
Donde los sonidos son melodías,
Que calman mi alma herida.
Por los hilos del silencio me perdí,
Pero encontré mi voz y mi libertad,
Ahora sé que nunca más estaré solo,
Siempre habrá alguien que me escuche y me ame de verdad.
