La luz entra a través de la ventana como si pidiera permiso, deslizándose sobre las superficies con una delicadeza que parece intencionada. Todo tiene un peso distinto en esta hora susp...
Quise olvidarte, pero eras el eco, la raíz que insiste en crecer en mi pecho. Me impuse silencio
Oh, muse of life, whose song I’ll… Your brow adorned, a radiant wing. With golden light, your path I’ll… Illuminating every sacred space. Your journey’s steps, a symphony,
Una mujer, fuente de esperanza y a… con su sonrisa ilumina cada día, su ternura envuelve como un suave… es un ángel que guía en nuestro pa… En su mirada, el reflejo de la pas…
Tu risa, dulce canto, despierta mil anhelos, brillando como encanto bajo los claros cielos. Tus manos son senderos
¡Albo amor tan bello, tan puro, ta… Que yo con delirio canté en mi niñ… ¡Cómo te han herido con bárbaro en… Los hombres que solo conocen la hi… ¡Cómo han profanado tu templo sagr…
Sinuosas curvas, mapa del deseo, Dibujan tu silueta tentadora, Cual olas de pasión embriagadora Que invitan a zarpar en su meneo. Caderas que se mecen cual trofeo,
Todos los días me paso por la calle del olvido, buscando aquel recuerdo que el tiempo ha escondido. Todos los días me asomo
**1. El Jíbaro y su Tierra** En el campo vive el hombre, sudor y tierra lo alaban, con su machete se clavan los sueños que su fe nombra.
El amor, melodía silenciosa, resuena en el pecho con fervor. Como brisa suave, deliciosa, despierta el alma con su calor. Dos miradas se encuentran, chispea…
Las montañas de plata con sus pico… dibujaban sus sombras en cielos ap… El río cristalino, un espejo sin p… reflejaba las ramas de la verde es… El sol de oro llameaba con su furi…
Veo la luna brillar, suspira en el cielo gris, pero sé que su luz callada no es para mí. El río murmura su canto,
Cuando yo me muera, sepúltenme aqu… Bajo la arena, con mi guitarra al… Que suene su música, su melodía en… Mientras las olas cantan su suave… El mar será mi tumba, mi eterno so…
En el papel, nuestras almas se enc… Palabras danzantes, un fuego que n… Cartas ardientes, un torbellino de… Nuestro romance epistolar, un dulc… Cada línea, un latido que nos acer…
¡Ay, del que ama la fortuna, que es mudable y engañosa! Los altos señoríos derrumba, y en miseria los convierte. El rico se vuelve pobre,