En este día tan especial, querida Ana María,
Quiero dedicarle un poema con alegría.
Es su cumpleaños, una fecha llena de luz,
Donde celebramos su vida, su esencia y su virtud.
Usted, una mujer de gran fortaleza y dedicación,
Especialista en historia familiar, con pasión.
Su conocimiento y sabiduría nos inspiran,
Nos guía en el camino de nuestras raíces y nos anima.
Pero además de su especialidad en investigación,
Usted es una madre abnegada, de corazón.
Con un hijo con capacidades especiales,
Ha demostrado un amor incondicional y sin iguales.
Su entrega y paciencia son admirables,
Cada día enfrenta desafíos incansables.
Con ternura y compasión, le brinda apoyo,
Haciendo de su hogar un refugio, un abrazo.
En este día especial, quiero desearle lo mejor,
Que la felicidad la acompañe a donde quiera que vaya.
Que sus sueños se hagan realidad y sus metas se cumplan,
Y que cada día sea un regalo que el universo le brinda.
Que la vida le sonría con cada nuevo amanecer,
Que el amor la encuentre y la haga florecer.
Que la salud la acompañe en cada paso que dé,
Y que la alegría sea su eterna compañera y su gran revé.
Feliz cumpleaños, querida Ana María,
Que este día y todos los que sigan sean de pura alegría.
Celebre su vida, sus logros y cada experiencia,
Es usted una persona maravillosa, llena de esencia.
Gracias por ser un ejemplo de amor y dedicación,
Por su especialidad en historia familiar y su abnegación.
Que este nuevo año esté lleno de risas y abrazos,
De momentos inolvidables y nuevos lazos.
Usted es una madre valiente y admirable,
Que ha dejado una huella imborrable.
Feliz cumpleaños, le deseo un mundo de bienestar y miel,
Que su historia siga siendo escrita con hilos de laurel.