En vano arde la ambición, se agita… abrasando a los mortales, débiles… Una llama insaciable, un tormento… que consume sus almas, sin tregua… Sus sueños, cual humo, se desvanec…
Se mecen los sauces en la brisa ca… como cartas sin rumbo, como sombra… La luna se asoma con su rayo de pl… y en el río dormido tu voz se retr… Tu nombre es un eco que cruza los…
En la pampa serena y vasta, donde el horizonte se expande, el gaucho canta y contrasta con la inmensidad que le manda. Jinete fiero y valeroso,
En el jardín donde el oro brilla, los dioses juegan, sombras de anta… con Zeus en trono, su rayo es extr… y Afrodita, en su amor, destila. Las ninfas danzan en fuente sencil…
En pálido fulgor la luna llora su lágrima de luz sobre mi frente, y el viento entre los árboles impl… tu nombre que me quema dulcemente. Tus ojos, dos abismos de misterio,
En los templos vacíos resuena el c… una voz que susurra: Dios ha muert… No por lanza o fuego, ni juicio fe… sino por olvido, por duda, por voz… Lo matamos, sí, con razón y saber,
Tu eres fuego, ardiente y poderoso Yo soy estepa, vasta y tranquila Dos elementos opuestos, pero unido… Por un destino que nos lleva a la… Eres fuego, que todo lo consume
Tu sombra es el fulgor de un sueño… la bruma que se enreda en mi alma… no hay eco que mitigue tu voz defi… ni un rostro que contemple tu fulg… En cada amanecer el aire está impr…
Golondrina de verano, De mi mano se va, se va. Vuela alto, libre y lejana, Dejando mi corazón en pena. Tus alas de plumaje oscuro,
El viento que viene, revienta, y el eco que queda, se cuenta. La brisa que besa, embelesa, la rama que danza, no cansa. El río murmura y depura,
Nadie sufre por amor, porque el amor, en su pureza, es un vuelo sin cadenas, es entrega, es belleza. Quien sufre es el ego herido,
Fueron tus besos cuchillos sin avi… un vino amargo en copa reluciente, caricias de fuego, flor incandesce… que al tocarme me dejaron quebradi… Tus palabras, promesas de cielo li…
En la tierra de la pluma y la tint… donde las palabras bailan con aleg… hoy celebramos a Críspulo Cortés, poeta sabio de gran valía. Con versos que acarician el alma,
Brisa del atardecer, Susurra secretos al oído, Acaricia mi piel Y despierta en mí recuerdos De un pasado casi extinto.
En sueños claros busco tu reflejo, la luz que vive oculta en la dista… un eco eterno al borde del espejo, la dulce voz que rompe mi templanz… Tu ausencia hiere, mas no dejo el…