**Bendita sea la cresta de las olas**
Bendita sea la cresta de las olas,
que rompe contra la arena con furor,
la espuma blanca que se desliza,
como un manto de pureza y candor.
Bendito sea el vaivén del océano,
que mece mi alma y me da paz,
el rugido de las aguas que me arropan,
y me liberan de toda ansiedad.
Bendito sea el sol que brilla sobre el mar,
que pinta el cielo de colores vivos,
el viento que acaricia mi piel,
y me llena de vida y de nuevos bríos.
Bendito sea el aire salado que respiro,
que me recuerda la inmensidad del mundo,
la belleza de la naturaleza que me rodea,
y la grandeza del Dios que todo hizo.
Bendita sea la cresta de las olas,
que me inspira, me calma y me serena,
que me recuerda que soy parte de algo más grande,
y que la vida es un regalo que hay que apreciar.
