Amor que no se acaba
Tu nombre es luz que al alba se derrama,
clarín de un sol que nunca se oscurece,
suspiro que en mi pecho permanece,
hogar donde mi sombra se desarma.
Eres la flor que brota en la retama,
la brisa que en el campo resplandece,
el pulso de mi sangre que estremece,
la herida que en mis labios se proclama.
Si el tiempo nos separa con su hielo,
serás la voz que entibia mi desvelo,
la llama que aún en sombras resplandece.
Y cuando el mundo cierre nuestro vuelo,
mi amor en cada estrella irá a tu cielo,
dejando en tu jardín lo que florece.
