Hicimos un dulce amor, sin clamor,
Solo suspiros suaves, una fanfarria
De pasión intensa, que cual zarabanda
Nos embriagaba con su hechizo flor.
Sensaciones nuevas, jamás antes vistas,
Fruto de emociones que desbordaban,
Exclamaciones mudas, cual melodías
Que en el silencio nuestro amor cantaban.
Cántaros repletos de alegrías hondos,
Donde la pasión se ahogó en delicias;
Ensueños compartidos, dulces fondos,
Que sellaron el lazo de nuestras vidas.