Sentado en una banca te imagino
sentada junto a mí, enamorada.
Quisiera fueras tú aquella hada
que enseñome a andar en mi camino.
Ignoro si estarás en mi destino.
Si de mí estarás enamorada.
Tal vez te sentaste ya cansada
de vagar sin suerte en tu camino.
Quiero hablarte y decirte que te quiero.
Abrazarte y besarte con ternura.
Adormecerte entre mis brazos, pero
reconozco que es una locura.
Y soy barco que no tiene marinero.
Soy pan al que le falta levadura.