Señor, no des a mis cantos el tris… Déjalos que se pierdan o se quemen…

De amar mucho tienes la palabra qu… De amar mucho dejas amor en torno…

Y primero era el agua: Un agua ronca, sin respirar de peces, sin orillas que la apretaran… Era el agua primero,

Señor mío: Tú me diste estos ojos… Rey jurado de mi primera fe: Tú m… Dulzura de mi ardua dulzura: Tú m… Soplo de mi barro: Tú me diste es…

Quiere el Amor Feliz –el que se p… poco...– arrancar un verso al alma… ¿Cuándo la miel necesitó dulzura? ¿Quién esencia de pomo echa en la… Quédese en hojarasca temblorosa

Pajarillos de jaula me van parecie… Si los suelto, perecen o regresan.…

Ya no tengo un recuerdo que me aco… ni un sueño que me alumbre... Sola… sin quietud ideal ni lucha ruda voy en la tarde gris o el alba roj… Ya nada me entusiasma o me acongoj…

En mi verso soy libre: él es mi ma… Mi mar ancho y desnudo de horizont… En mis versos yo ando sobre el mar… camino sobre olas desdobladas de otras olas y de otras olas... A…

La niña ciega quiere saber cómo es el mar: Desde la orilla tiende su mano

Era buena la Vida: Había rosas. Unos minutos antes me había sonreí… Pasó volando y me rozó la frente. No sé por dónde vino

Hasta en tu modo de olvidar hay al… Creía yo que todo olvido era sombr… ¡Tu olvido es la alborada borrando…

Ven, ven ahora, que quizá no sea d… Ven pronto, que quién sabe si no s… Ven, por piedad; no escuches al qu… Cierra los ojos y corre, corre, a…

Tú eres una ventana al mar: Venta… al mar cerrada... Tras tus hojas juntas está el mar a la luna blanco, gran… al sol poniente... Al alba, gris;…

Más allá de tu nombre y de mi nomb… qué será este esperar sin esperanz…