Dori Gómez
(2015)
MI HOMBRE Mi hombre, me mira con ojos de deseo, él contempla mi boca, sonríe provocativo,
Camino por la ciudad, el calor del verano me esta sofocando, necesito aíre, me lo estás quitando.
Amo que me digas que me amas que a pesar de mis cicatrices esté… que la cama se mueva noche tras no… llena de deseo, lujuria, pecado de… las llamas lamen nuestros cuerpos…
Calles de gente que no mira, que pasan sin verme me volví invisible para ellos. Si estos idiotas supieran que no me hace falta su pobre limo…
Hablan sus ojos, cuentan historias… cuando los abre de par en par veo felicidad en ellos, están tan abiertos que sonríen. Y, ¡Esa mirada de sorpresa!
La hembra pasea por Granada, el rumor del agua del Darro la acompaña en aquel camino, la luna la mira caminando. ¡El grito cómo sobresalta!
Soy el vicio en tus manos, la perversión de tus pensamientos, soy tu deseo más profundo. Quítame la ropa y sumérgete en mí carne hasta desgarrarla.
En un tono denso como la miel y profundo como el mar le dije: tú solo eres mío y lo besé de tal manera que él tem… hasta quedarse sin aire.
Serena mar noche de luna azul el agua fresca envuelve mi quebranto penas de amor
En primavera la flor dijo a la abeja: ¡Qué descarada! Robas mi dulce néctar, le contesto ella:
Brilla el bordillo de la acera, a la luz de la farola, la noche se hace locura, en esta ciudad de soledades acompañadas.
Hola amor, me alegro de verte tanto tiempo ¿cómo estás? Despúes de todo aún pienso en ti aunque el mundo se hundiera a nues… Disculpa tantos whatsapp
Bajo el cielo de Granada vuela una vieja melodía hablando de amor, una guitarra suena en la tarde soleada.
En la sabana el tigre está dormido, en el silencio, del calor africano; la mujer piensa:
Luces de noche disfrazan los canales, de enamorados. Guido Borelli. Ocaso de oro