No toques mi corazón, porque yo no quiero, aléjate como las olas se alejan de la arena. Manos de terciopelo,
Esa lavanda cubre todo mi patio. Trina aquel pájaro. El arce cubre la escalera de piedra.
En el cerezo. Tela de seda líquida teje la araña. Junto al rosal el eco de la lluvia.
De mil colores en el cabello negro, son sus adornos. Su tez blanca embellece con polvo arroz,
He buscado a Dios Entre las lecturas del Evangelio Y las oraciones de niño. Lo he buscado en las ofertas de lo… Y en las charlas de un sacerdote.
Esas cercetas van comiendo gusanos. Casi es otoño.
El concepto más triste es probable… Es una enfermedad nacida de un amo… Puede ser eliminada a través de la… Se puede curar sin efectos secunda… Cuando las flores se quitan de man…
Solo se dedicaba a decir lo bellas que eran sus letras. Halagos a sí mismo se dirigía. Envidia insana de las personas, que realmente escribían.
Recuerdos me vienen de cuando fuiste mío ahora muero al pensarte en aquel bosque. Tú me hacías versos
Se van los años tejiendo sus días han dejado retazos de recuerdos en esta alma mía.
Día otoñal caen las hojas ocres. Se oye ladrar. Se ríe el niño arrancando las flores.
Aún pienso entre sábanas de raso e… en mi soledad sé que solo sentí am… cuando te acariciaba, Lucía. Estas ganas de vivir junto a ti en… jugando a encontrar nuestras manos…
Extraño el tiempo de las dulces me… aquellos días donde en Granada florecían flores de azahar, el aroma a naranja inundaba, la Plaza de los Campos.
Amor, pasión, dame vida échame gasolina que arda esta noche hasta la alborada. Qué las sábanas nunca estén frías
Prefiero quemarme a que me dejes apagarme como una pavesa. Esto parece una tragedia griega eras mi Dios, miento aún lo eres,